El 29 de abril de 2020 la OMS cambió su protocolo en cuanto a las recomendaciones de ingesta diaria de sodio en adultos y en niños.
La ingesta excesiva de sodio está directamente relacionada con varias enfermedades no transmitibles. Con lo que simplemente reduciendo el consumo de sal podremos reducir las posibilidades de sufrir una de estas enfermedades no transmitibles.
¿Qué y cuáles son las enfermedades no transmitibles?
Las enfermedades no transmitibles, en adelante ENT según la OMS son generalmente enfermedades crónicas y de desarollo lento.
Estas ENT se dividen en cuartro grupos:
- Enfermedades cardiovasculares (como infartos)
- Cáncer
- Enfermedades respiratorias crónicas (como el asma)
- Diabetes
En concreto, el consumo excesivo de sodio se ha relacionado directamente con el padecimiento de hipertensión, accidentes cerebrovasculares y enfermedades cardiovasculares.
Al reducir la ingesta de sal se ha observado la disminución de presión arterial en adultos y niños, reduciendo así el riesgo de sufrir enfermedades coronarias y accidentes cerebrovasculares, ambas dolencias relacionadas estrechamente con la hipertensión.
Y… ¿qué recomienda la OMS en cuanto al consumo de sal?
Que la reduzcamos tanto como sea posible.
Para los adultos, y es recomendación firme, la ingesta de sodio máxima será de 2 gramos, que en sal se traduce en unos 5 gramos.
Para los niños mayores de 24 meses la cantidad de sodio máxima de 2 gramos deberá reducirse para adecuarse a las calorías el que niño consuma. Si en una dieta de un adulto de 2000kcal la cantidad máxima de sodio es de 2 gramos en una dieta de un niño de, pongamos, 1000kcal, la cantidad máxima de sodio sería de 1 gramo.
Sobre los lactantes y niños con alimentación complementaria no hace mención, así que consideraremos que debemos evitar su consumo hasta los 24 meses como mínimo.
Pero… ¡si 5 gramos de sal al día es un disparate!
Eso es lo que pensé yo cuando comprobé, por curiosidad, cuanta cantidad es 5 gramos de sal. Ni cuando cocinaba para mi pareja y yo he gastado tal cantidad al día. Cierto que comemos con poca sal de siempre, pero también es cierto que siendo dos podría haber usado hasta 10 gramos al día.
Entonces… ¿por qué recomiendan que 5 gramos de sal como máximo?
Primero porque es un máximo, por debajo puedes pasarte todo lo que quieras.
Y porque el problema está, como en el caso del azúcar, en la cantidad de sal que comemos sin saber que la estamos comiendo.
Cualquier alimento que esté procesado va a llevar sal, unos más que otros, claro, y es lo que se llama sal oculta o sal invisible. Por eso es muy importante leer los etiquetados y no dejarnos engañar por los fabricantes.
Se considera que un alimento procesado con MUCHA sal es aquel que tiene más de 1.25 gramos de sal por cada 100 gramos de producto. Tiene poca sal si su contenido de sal es 0.25 gramos por cada 100 gramos.
Los fabricantes, además, tienen etiquetados para animarnos a comprar sus productos dándonos, a veces, la falsa certeza de que lo que estamos comprando es saludable. Y así aparecen los productos bajos en sal, con bajo contenido en sodio y otras nomenclaturas que únicamente significa que esos productos tienen un porcentaje de sal menor que otros de similares características.
¿Cómo podemos reducir la ingesta de la sal oculta?
Pues evitando comer (y comprar) «alimentos con etiqueta».
Los alimentos sin etiqueta son los alimentos frescos que son los que son, sin añadidos, frutas y verduras frescas no llevarán sal o azúcar añadida.
Si compramos algunos alimentos procesados es necesario que leamos bien la etiqueta para evitar añadidos. Las frutas y verduras congeladas, por ejemplo, suelen ser buenos procesados, sin aditivos, pero siempre es mejor leer la etiqueta para asegurarse.
Y los alimentos ultraprocesados, con muchos ingredientes y grandes cantidades de azúcar y sal dejarlos para contadas ocasiones y evitar que los coman los menores de 3 años.
