Ahora que se acerca el verano y con él los días de playa y piscina creo que es un buen momento para hablar del sol y de las cremas de protección solar para bebés que el mercado ofrece. De todos es sabido lo peligroso que es el sol para nuestra piel, sobre todo para las pieles de los más pequeños. Las recomendaciones que desde el ministerio de sanidad se repiten cada verano son claras, no tomar el sol entre las 12 y las 17; protegerse con ropa clara, sombrero y gafas de sol; hidratarse bien y usar un factor de protección solar adecuado a cada tipo de piel.
¿Qué protección solar debería usar con un bebé hasta 6 meses?
Digan lo que digan en la farmacia y diga lo que diga el bote de protector solar, a los bebés menores de 6 meses no se les debe poner crema de protección solar sea del tipo que sea. Su piel es muy delicada y les podemos ocasionar un episodio de dermatitis. La AEPED es muy clara en sus recomendaciones.
Los bebés menores de 6 meses no deben exponerse directamente al sol, deben ir cubiertos con ropita y deberían ir a la playa o piscina o de paseo antes de las 12 de la mañana y después de las 6 de la tarde.
Y de los 6 meses a los 3 años… ¿qué características debe cumplir el fotoprotector que utilicemos?
Hay dos tipos de fotoprotectores, los que protegen por pantalla física y los que protegen por pantalla química. En menores de 3 años la crema de protección solar deberá siempre ser de pantalla física para evitar reacciones alérgicas y dermatitis causadas por la crema.
Los protectores solares, además, no deben tener nano partículas (así lo recomienda la Unión Europea), para evitar que estas sean absorbidas por la piel del bebé. Esto debe estar claramente indicado en la etiqueta del producto.
Aun con la crema de protección solar puesta, la recomendación de permanecer a la sombra, con ropa que cubra la mayor parte del cuerpo y con sobrero y gafas de sol es igualmente aplicable a los niños a partir de 6 meses y a los adultos.
Tipos de fotoprotector con pantalla física
Crema de protección solar con pantalla física son de dos tipos. Con dióxido de titanio y con dióxido de zinc.
El dióxido de titanio no es biodegradable y ha sido catalogado por la IARC como potencialmente carcinógeno, sin embargo el dióxido de zinc es biodegradable y no tóxico.
Yo lo tengo claro, siempre compro cremas de protección de pantalla física, de dióxido de zinc y sin nanopartículas.
Cómo funciona el factor de protección solar
Cada piel es diferente y unas tardan más en quemarse que otras. Con el protector solar lo que hacemos es multiplicar el tiempo de exposición al sol antes de quemarnos. Así si mi piel es tan blanca que a los 10 minutos de exposición se quema, con un fotoprotector factor 30 podría estar 300 minutos sin quemarme. Para los niños es igual, y además debemos ponerles más crema tras los baños.
Mi experiencia en la playa con el bebé
Mi hija es muy blanca y me da pánico que se queme. Mi rutina para ir a la playa, aunque larga, ha dado muy buenos resultados hasta la fecha.
Antes de ponerle el bañador a la niña la embadurno bien con su fotoprotector. Después la visto con su bañador, que es de cuerpo entero y con tela de factor de protección solar factor 50, al igual que su gorro y salimos a la playa.
Para la arena no llevo sombrilla, sino una especie de iglú dentro del cual la niña puede jugar completamente a la sombra y donde le meto una bañerita hinchable para que se bañe también a la sombra.
Aun así cada hora le pongo crema en las pocas partes de su cuerpo expuestas al sol, por si se acerca a al orilla a por agua o nos bañamos juntas en el mar, después de los baños también le pongo.